Hispan TV, 14/08/2016
El Frente Al-Nusra, el grupo terrorista que opera en Siria, se divorció por completo de Al-Qaeda, y anunció que no tiene nada que ver con esa organización extremista, por lo que ha elegido el nuevo nombre de Frente Fath al-Sham.
Este hecho se produjo en medio de los profundos cambios en el escenario bélico en Siria a favor del Ejército y justo cuando Rusia y EEUU anunciaron que atacarán a aquellos grupos reconocidos como terroristas en el país árabe. En el siguiente artículo pretendemos dar un repaso a la historia de ese grupo extremista, además de estudiar los posibles motivos de su cambio de nombre.
Frente Al-Nusra
Según se ha descrito, el grupo está formado por fuerzas suníes cuyo único objetivo es derrocar el Gobierno de Al-Asad e instaurar un califato. Además intenta incitar al pueblo sirio para que tome parte en la guerra contra Damasco.
Incitar
Desde que estalló el conflicto, a principios de 2011, han sido numerosos los grupos terroristas surgidos para luchar contra el gobierno. Uno de los principales ha sido Al-Qaeda, que operaba en el país árabe mediante el Frente Al Nusra, liderado por Abu Mohamad al-Yolani. Este grupo, gracias a las ayudas de algunos países de la región, como Arabia Saudí, Catar, Turquía, entre otros, empezó a reclutar ciudadanos de Jordania, Túnez, Libia, Chechenia y otros países más. De esta forma se convirtió en uno de los grupos terroristas más poderosos de Siria.
Al-Nusra, para materializar su objetivo, o sea derrocar el Gobierno sirio, recurrió a diferentes tácticas, como coches bomba, ataques suicidas, atentados contra centros comerciales y aeropuertos. Sus principales actividades se realizaron en la capital, Damasco, y Alepo, bastión terrorista. Si bien en sus comunicados había reiterado que no atacaría a los civiles, los informes y videos muestran cómo una sombra de muerte degollaba a niños y mujeres chiíes y alauitas.
De acuerdo con la información de la Fundación Quilliam, muchos de los milicianos de Al Nusra seguían al líder de Al Qaeda en Irak, Abu Musab al-Zarqawi, quien luchaba contra las fuerzas armadas de EE.UU. Tras la ruptura entre Al Qaeda en Irak y el Estado Islámico en el 2013, Al Nusra permaneció públicamente dentro de las filas de Al Qaeda.
A diferencia de Daesh y Al Qaeda, el objetivo del Frente Al Nusra no es implantar una Yihad global, sino circunscribirla a Siria y, parcialmente, a El Líbano, donde Al Nusra se enfrenta de vez al Movimiento de Resistencia de El Líbano, Hezbolá.
La dimensión de los crímenes de ese grupo era tan amplia que provocó la rabia y la furia de la comunidad internacional, así como de los centros de derechos humanos. Esto motivó a EEUU a alistarlo, el 11 de diciembre de 2012, como un grupo terrorista, lo mismo que hizo la ONU el 14 de mayo de 2014.
¿Por qué se separó de Al-Qaeda?
Dado que este grupo, de hecho, está representando a varios países en Siria y promulga sus planes contra el Gobierno de Al-Asad, considerarlo como un grupo terrorista, obstaculiza el camino de las ayudas financieras y logísticas. En este contexto, países como Turquía y Catar celebraron varias rondas de reuniones con los líderes del Frente Al-Nusra en Doha y Estambul, enfatizando en su separación de Al-Qaeda, llegando incluso a amenazar con suspender las ayudas financieras. Toda esta situación se produce en medio de los avances del ejército sirio, especialmente después de la entrada de Rusia en el campo de batalla del país árabe. Dado que el hecho de ser considerado terrorista impedía a sus patrocinadores continuar con la ayuda, tal como antes, Al-Nusra se vio muy presionado y al borde de su aniquilación. Así que, para seguir con sus ataques y la recepción de ayudas, eligió esta nueva estrategia en la que, seguramente, contó con el asesoramiento de sus patrocinadores, quienes persiguen sus objetivos en Siria a través de estos grupos terroristas.
Además de esto, el reciente acuerdo ruso-estadounidense basado en el bombardeo de las posiciones de grupos extremistas como Daesh y el Frente Al-Nusra, les hizo pensar que de cambiar su nombre podrían eludir las presiones y los bombardeos.
Otra oportunidad que le otorga este divorcio a Al-Nusra, radica en que, ahora, puede presentarse como un grupo moderado, que no tiene nada que ver con aquellos pensamientos e ideologías radicales que profesa Al-Qaeda y, así, puede participar en las reuniones que se celebran sobre el futuro de Siria, como una potencia opositora.
Con todo lo expuesto, hay que plantear que la ideología extremista takfirí, que incita a sus miembros a llevar a cabo ejecuciones en masa, degollar niños y mujeres, no es algo que pueda eliminarse con tan solo un cambio de nombre. Solo se trata de una estrategia bien calculada desde la Casa Blanca y desde varios países de la región de Oriente Medio, con el objetivo de allanar el terreno para mantener con vida a este grupo, tal como se desprende de las palabras del portavoz de la Casa Blanca, Josh Ernest, quien anunció que los Estados Unidos y los socios de la llamada Coalición Internacional contra Daesh se han centrado en hacer mejorar la capacidad de las fuerzas de la oposición moderada sobre el terreno en Siria.