sábado, 16 de junio de 2012

INFORME: REBELDES RESPONSABLES DE LA MASACRE DE HOULA

John Rosenthal



Fue, en palabras del enviado especial de la ONU, Kofi Annan, el "punto de inflexión" en el conflicto de Siria: una salvaje masacre de más de 90 personas, predominantemente mujeres y niños, por lo cual el régimen sirio de Bashar al-Assad fue culpado inmediatamente por la práctica totalidad de los medios de comunicación occidentales. Pocos días después de los primeros informes de la masacre de Houla, EE.UU., Francia, Gran Bretaña, Alemania y otros países occidentales anunciaron que iban a expulsar a los embajadores de Siria en señal de protesta.

Sin embargo, según un nuevo informe de uno de los principales diarios alemanes, el Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ), la masacre de Hula fue cometida por militantes sunitas anti-Assad, y la mayor parte de las víctimas eran miembros de la  de las minorías chiíta y alauí, que han sido en gran medida de apoyo de Assad. Para su relato de la masacre, el informe cita a opositores de Assad, que, sin embargo, se negaron a que sus nombres aparecieran en la prensa por temor a represalias por parte de grupos armados de la oposición.

Según fuentes del artículo, la masacre se produjo después de que las fuerzas rebeldes atacaran tres retenes controlados por el ejército en las afueras de Houla. Los controles de carretera se habían establecido para proteger a pueblos cercanos de mayoría alauí de los ataques de las milicias sunitas. El ataque rebelde provocó una petición de refuerzos por parte de las unidades del ejército sitiado. Según informaciones, fuerzas rebeldes y del ejército sirio lucharon durante unos 90 minutos, tiempo durante el cual "decenas de soldados y rebeldes" murieron.

"De acuerdo con los relatos de los testigos", el FAZ informe continúa:

La masacre se produjo durante este tiempo. Los muertos eran casi exclusivamente de las familias pertenecientes a las minorías chiíes y alauís de Houla. Más del 90% de la población de Houla son sunitas. Varias decenas de miembros de una familia fueron asesinados, la cual se había convertido del Islam sunita al chiíta. Miembros de los Shomaliya, una familia alauí, también fueron asesinados, al igual que la familia de un miembro sunita del parlamento sirio, que es considerado como un colaboracionista. Inmediatamente después de la masacre, los autores debieron filmar a sus víctimas y luego los presentaron como víctimas sunitas en videos publicados en Internet.

El FAZ se hace eco de informes de testigos oculares recogidos de refugiados de la región de Houla por los miembros del monasterio de St. James en Qara, Siria. Según fuentes del monasterio citadas por el holandés experto en Oriente Medio Martin Janssen, los rebeldes armados asesinaron a familias enteras "alauíes" en el pueblo de Taldo, en la región de Houla.

Ya a principios de abril, la madre Inés-Mariam de la Croix del monasterio de St. James advirtió que las  atrocidades rebeldes eran reinterpretados en los relatos de los medios de comunicación, tanto árabes como occidentales, como atrocidades del régimen. Ésta citó el caso de una masacre en el barrio de Khalidiya en Homs. De acuerdo con un relato publicado en francés en la página web del monasterio, los rebeldes reunieron a rehenes cristianos y alauíes en un edificio en Khalidiya y volaron el edificio con dinamita. A continuación, atribuyó el crimen al ejército sirio regular. "A pesar de que este acto se ha atribuido a las fuerzas del ejército regular..., las pruebas y testimonios son irrefutables: fue una operación llevada a cabo por grupos armados afiliados a la oposición", escribió la madre Inés-Mariam.

John Rosenthal escribe sobre la política europea y las cuestiones de la seguridad transatlántica.