lunes, 16 de noviembre de 2020

LOS DIRECTIVOS DEL GIGANTE BIOTECNOLÓGICO MODERNA HACEN CAJA GRACIAS A LA ESPECULACIÓN SOBRE SU VACUNA

niusdiario.es, 03/07/2020

[Sobre la empresa que producirá la nueva vacuna milagrosa de ese occidente que dijo que el virus era menos que una gripe...]



Uno de los directivos de la compañía ordenó una venta masiva de acciones sólo días antes de la publicación de los primeros resultados del ensayo clínico de la vacuna

El CEO de la empresa ha vendido acciones por cantidades millonarias, aunque su plan de venta se conocía desde antes de la pandemia

La compañía de biotecnología Moderna Inc. podría cosechar cientos de millones de dólares en venta y revalorización de acciones si consigue acabar a la cabeza la carrera por la vacuna del COVID-19. Si por el contrario no es la primera en dar con la vacuna, el valor de la empresa a corto plazo podría derrumbarse.

Mientras tanto, el director ejecutivo de la empresa está amasando millones de dólares gracias a la venta de unas acciones que han triplicado su precio tras las noticias del progreso de la firma en el desarrollo de la codiciada vacuna, según informa la agencia de noticias Reuters. Las ventas - a manos del propio CEO Stéphane Bancel, un fondo a nombre de sus hijos y de compañías a su nombre - asciende a 21 millones de dólares (18'7 millones de euros) entre el 1 de enero y el 26 de junio, incluidos 6 millones de dólares en mayo.

El director médico de la empresa, Tal Zaks, ha vendido la mayoría de sus acciones disponibles por un valor de 35 millones de dólares desde enero, según las consultas realizadas por Reuters.   

Estas jugosas liquidaciones de acciones resaltan los incentivos poco habituales que tienen ahora los ejecutivos de las compañías de biotecnología para destacar - cuando no inflar- los logros alcanzados en la fase de pruebas de medicamentos que muy a menudo nunca llegan a comercializarse, de acuerdo con los expertos en la compensación de directivos consultados por Reuters. Los comunicados optimistas alrededor de la vacuna del coronavirus, aseguran estos expertos, podría llevar a los inversores a pagar de más por las acciones de la compañía o crear falsas esperanzas entre los responsables públicos y sanitarios que buscan maneras efectivas de combatir la pandemia.

Bancel fijó un calendario de ventas de sus acciones - conocido como plan 10b5-1 - mucho antes de que se produjese el impacto de la pandemia. Estos planes de venta de acciones de directivos pretende evitar que los directivos de las empresas operen con sus acciones con información privilegiada, y tomen decisiones de venta antes de hacerse pública información perjudicial para la empresa o retrasen las ventas hasta que se comunique información beneficiosa para la cotización.

Zaks incrementó su ritmo de venta gracias a un nuevo plan elaborado el pasado 13 de marzo. Eso fue sólo tres días antes de que Moderna anunciase la primera prueba en humanos de su vacuna en estudio. Noticias que hicieron que las acciones de la empresa se disparasen un 24% y marcaba un camino de revalorización de la cotización en bolsa de la empresa.

Las ventas permiten que los directivos generen grandes beneficios en lo que podría ser un optimismo fugaz del mercado, asegura Jesse Fried, catedrático de Derecho de Harvard y autora de un libro sobre directivos e información privilegiada. 

"Esta podría ser su única oportunidad de hacer grandes cantidades de dinero sin finalmente la vacuna no funciona", asegura Fried. Los directivos tienen una gran libertad a la hora de decidir qué información hacen pública y los directivos de Moderna tienen una enorme motivación para "mantener la cotización al alza".

La investigación de la agencia Reuters no ha encontrado ninguna prueba de que Bancel, Zaks o Moderna hayan inflado o exagerado el progreso de la vacuna de la compañía.

Un portavoz de Moderna ha comunicado que la liquidación de acciones de Bancel es sólo una pequeña porción de sus activos y que "esencialmente, todos los activos de su familia permanecen invertidos en Moderna." Bancel, sus compañías y sus hijos poseen el 8% de la compañía, convirtiéndolo en el segundo máximo accionista. 

Zaks no ha respondido a las consultas de Reuters y Moderna no ha querido comentar su venta de acciones de la compañía.

Ciencia por comunicado de prensa

Tanto Bancel como Zaks han sido muy optimistas en cuanto a las perspectivas de Moderna en sus declaraciones públicas.

Bancel llama a la tecnología mRNA que utiliza la compañía para todo el desarrollo de sus vacunas como "el software de la vida", con potencial para generar "una nueva clase de medicinas". También ha asegurado que el proceso de Moderna es capaz de desarrollar vacunas mucho más rápido y con mayores posibilidades de "éxito técnico" - y por lo tanto ser aprobadas - que otras firmas.

"No conocemos a nadie más que sea capaz de hacerlo a esta escala, con esta concentración y a esta velocidad", aseguró ante los inversores el 2 de junio. Un poco antes, en una conferencia de resultados el pasado 7 de mayo, Bancel aseguró que "nunca había estado tan entusiasmado y optimista ante el futuro de Moderna".

Muchos inversores y analistas se muestran igual de optimistas, aunque reconocen que es complicado evaluar las perspectivas de Moderna debido a las fases tan tempranas de su investigación.

La compañía generó críticas entre la comunidad científica por publicar información incompleta de un ensayo realizado por el Instituto de Salud Nacional de Estados Unidos (NIH por sus siglas en inglés). Moderna anunció el pasado 18 de marzo que su vacuna había generado anticuerpos en un pequeño subgrupo de voluntarios sanos. El anuncio disparó las acciones de Moderna un 20%, hasta su máximo de 80 dólares por acción.

Algunos científicos sugieren que Moderna no debería haberlo hecho público hasta que tuviese los resultados en todos los sujetos. "Esto es ciencia por comunicado de prensa", asegura Paul Offit, del Centro de Educación sobre la Vacunación del Hospital Infantil de Filadelfia. Sin los datos completos, asegura, "sólo puedes interpretar los posos del café".

El Dr. Anthony Fauci - el máximo responsable de enfermedades infecciosas de Estados Unidos - compartió los resultados con los gobernadores de los estados, según anunció el vicepresidente Mike Pence en Twitter el día del anuncio de Moderna. Pero Fauci - que está al cargo de las pruebas clínicas de Moderna - aseguró después que no le había gustado la publicación de información hecha por la compañía.

Bancel por su parte explicó a los inversores en la conferencia de junio que la cúpula de Moderna estaba preocupada por la cantidad de gente que había tenido acceso a esa información, incluido el NIH. Bancel aseguró entonces que la compañía había publicado los resultados parciales porque tenía miedo de que se filtrasen y que consideraba que esos resultados parciales era una información que todos los inversores debían conocer al mismo tiempo. Según las declaraciones de un portavoz de Moderna hechas a Reuters, la compañía cree que esa información tenía que ser hecha pública para cumplir con las reglas de la CNMV estadounidense. 

El día después del comunicado público del lunes 18 de mayo, Zaks vendió 125 mil acciones, por un valor de 10 millones de dólares, a 78 dólares la acción, frente a los 66 dólares a los que cotizaban el viernes anterior.