RT, 25/02/2012
El organismo que ‘alimenta’ con los datos clave sobre la situación en Siria a la mayoría de los medios de comunicación occidentales y con ellos, a sus lectores por todo el mundo, son poco de fiar, debido a que está encabezado por un comerciante, sin formación, y que ni siquiera reside en el país del conflicto. Así lo ha declarado este sábado el portavoz de la Cancillería rusa, Alexánder Lukashévich.
Hechos que hablan por sí mismos
"Según nuestros datos, el 'Observatorio sirio de los Derechos Humanos' que provee los datos, cuenta con tan solo dos personas, un director y un secretario traductor. Está encabezado por un tal R. Abdurajmán, a quien no solo falta la formación periodística o jurídica, sino también una simple educación secundaria completa”, afirmó el diplomático.
En el marco de una entrevista con los medios de comunicación en noviembre del año pasado él mismo informó que reside en Londres, donde se encuentra la sede del organismo, goza de ciudadanía británica y se dedica a actividades comerciales (dueño de una cafetería), según revela el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia.
Además, se precisa que los representantes del ‘observatorio’ evitan a toda costa contactar con los diplomáticos rusos. "Creemos que estos hechos hablan por sí mismos sobre la fiabilidad de la información proporcionada por esta estructura", menciona la Cancillería rusa.
Datos que no cuadran
Actualmente los datos importantes provenientes del ‘observatorio’ sobre la situación real en torno al conflicto en Siria y el número de las víctimas mortales, están siendo utilizados por casi toda prensa occidental.
De acuerdo con las cifras de la ONU, el número total de víctimas en los violentos enfrentamientos en Siria superó las 5.000 personas, mientras que los defensores de derechos humanos en los medios de comunicación occidentales informan de más de 7.500 fallecidos. Al mismo tiempo, las autoridades sirias insisten en que en choques con la oposición resultaron muertos más de 2.000 soldados y policías, contra quienes actúan militantes perfectamente armados.
Ya había sucedido
A mediados del año pasado estalló un escándalo parecido, cuando se reveló que un estadounidense residente en Gran Bretaña, Tom MacMaster, se había hecho pasar por una lesbiana siria, describiendo en su blog, que contaba con miles de seguidores, acontecimientos en torno a la situación en el país, que no tenían nada que ver con la situación real.
Entonces el blog se había hecho tan popular, que la 'autora', denominada Amina Abdalla Arraf al-Omari, hasta había llegado a dar varias entrevistas, incluso a la agencia AP y al periódico británico 'The Guardian', respondiendo a los cuestionarios a través del correo electrónico.