Sputnik, 12/12/2022
[Algunos ya advertimos hace años que los conflictos yugoslavos provocados por EEUU y la OTAN se cerraron en falso y ahora que Rusia ha plantado cara al imperialismo occidental se están reactivando.]
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, aseguró que Washington y Pristina no respetan el derecho internacional y que ese desacato ha alimentado la inestabilidad y la escalada de tensiones en el norte —poblado mayormente por serbios— de la región de Kosovo.
El mandatario culpó a Estados Unidos y a Kosovo de "hacer cualquier cosa, siempre que quieran y tanto como quieran", sin apegarse nunca al cumplimiento de los tratados internacionales establecidos.
"Tenemos una pregunta para nuestros socios estadounidenses. Dígannos, ¿a qué acuerdo se atiene Pristina y a qué ley se atienen ustedes? ¿La Carta de la ONU, la Resolución 1244 del Consejo de Seguridad de la ONU, el Acuerdo de Bruselas o el Acuerdo de Washington? Nómbrenos uno de estos documentos que Pristina respete, al menos uno que ellos y Estados Unidos respeten", dijo Vucic en un mensaje público tras una reunión del Consejo de Seguridad de Serbia en medio de las crecientes tensiones en el norte de Kosovo.
"Hicieron un monstruo juntos hace 23 años. Terminaron de hacerlo en 2008 y nada más", señaló Aleksandar Vucic, en referencia a cuando la OTAN y sus aliados occidentales intervinieron en el conflicto de Kosovo en 1999 y a cuando ocurrió la proclamación unilateral de la independencia de la región rebelde, poblada en su mayoría por albaneses.
El presidente serbio convocó a dicha reunión después de que el primer ministro de Kosovo, Albin Kurti, instara a la KFOR —una fuerza militar multinacional liderada por la OTAN— a desmantelar las barricadas levantadas por los serbios locales en el norte de la autoproclamada república.
Si la KFOR se niega a intervenir, las propias fuerzas de seguridad kosovares estarán preparadas para llevar a cabo la operación en contra de los serbios, según Kuti.
La jefa del Gobierno serbio, Ana Brnabic, aseguró que los serbios que montaron barricadas solo "están expresando claramente sus deseos y lo están haciendo pacíficamente".
Horas antes del discurso de Vucic y la reunión del Consejo de Seguridad de Serbia, las fuerzas especiales de la Policía de Kosovo (ROSU) asaltaron con vehículos blindados una represa situada en el lago Gazivode, de acuerdo con información del director de la Oficina serbia para Kosovo, Petar Petkovic.
Según fuentes no oficiales, los miembros de la ROSU derribaron las cercas que cerraban la carretera en el emplazamiento de Gazivode para llegar más rápido a las bases de Yasenovik y Brniak. Un obrero local relató que llegó a Gazivode a medir el nivel del agua tras las fuertes lluvias y vio cómo cinco miembros de la ROSU entraron y rompieron la compuerta de la represa.
Ante esta crisis, la Unión Europea (UE) advirtió que no tolerará ataques contra su misión civil en Kosovo para el imperio de la ley (EULEX, por sus siglas en inglés) y alentó a retirar las barricadas en el norte de la autoproclamada república.
El 11 de diciembre, el Gobierno serbio anunció que solicitará a las KFOR —una fuerza militar multinacional liderada por la OTAN— que le permita desplegar sus tropas militares y policiales en Kosovo y Metojia. Esta decisión de las autoridades serbias ocurre después de varias horas de tensiones en el norte de Kosovo, donde se han registrado explosiones y disparos.
Sin embargo, el presidente serbio, Aleksandar Vucic, reconoció que es muy probable que su petición sea rechazada por los líderes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). "Por supuesto, no me hago ilusiones y sé que denegarán esta petición. Y se los digo de antemano", subrayó.
Los residentes serbios de la región de Kosovo y Metojia han levantado barricadas en el norte de la región para impedir que la policía kosovar se lleve a Pristina a sus connacionales detenidos por atacar a los agentes de seguridad. También lo hacen como protesta por la detención del expolicía Dejan Pantic.
El expolicía —junto con otros miembros de etnia serbia que trabajaban como agentes de la ley en Kosovo— abandonó su trabajo a mediados de noviembre y este 10 de diciembre fue detenido en el paso fronterizo de Jarinje. Según los informes locales, los residentes serbios se han reunido a la entrada y la salida del pueblo de Leposavic, mientras que cientos más se congregaron en Rudare y Srbovac para construir barricadas. En el norte de Kosovska Mitrovica sonaron as sirenas antiaéreas.