Daniel Bellaco
Digital Sevilla, 09/07/2019
Rusia ha exigido al Reino Unido que justifique su negativa de acreditar a RT y Sputnik en la Conferencia Global sobre Libertad de Prensa en Londres y las acusaciones que ha lanzado contra estos dos medios.
Según ha declarado la Cancillería rusa deberá hacerlo en 24 horas tildando de “inadmisible” que las autoridades británicas veten a estos medios rusos vertiendo además públicamente “acusaciones duras contra nuestros medios de información” afirmando que tienen un “papel activo en la propagación de desinformación (…) sin presentar pruebas”.
"Exigimos que Londres en 24 horas presente pruebas concretas, sobre la base de las cuales se hará una declaración correspondiente. En caso contrario calificaremos esas acusaciones de difamación que denigra la imagen de los medios rusos, lo que es un ejemplo ilustrativo de la propagación de noticias falsas y desinformación", afirma la nota del Gobierno ruso.
No queda ahí la cosa ya que una delegación oficial rusa no pudo asistir a la conferencia "porque se les denegaron los visados de entrada al país".
Rusia ha criticado que los organizadores del encuentro "convirtieron el evento en un instrumento para implementar sus tareas políticas. (…) Suponemos que otros países y periodistas responsables sacarán sus conclusiones correspondientes. Esperamos que las ONG de derechos humanos y los organismos internacionales encargados no titubeen a la hora de expresar su postura".
El Ministerio ruso ha añadido que había comunicado la situación en torno a los medios rusos a Harlem Désir, representante de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) para la libertad de prensa.
El 5 de julio se comunicó que el Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido se ha negado a acreditar a RT para la Conferencia Global sobre Libertad de Prensa.
Al día siguiente, sin dar ninguna explicación por su decisión, los organizadores de la Conferencia han rechazado acreditar a un periodista de Sputnik.
Por su parte, RT informó en su cuenta de Telegram que los representantes de la organización británica les comunicaron que no quedaban plazas.
Este trato ha sido calificado de discriminatorio por la Embajada de Rusia en el Reino Unido.
Ya en noviembre de 2016, la Unión Europea dio un paso hacia la censura mediática al aprobar el Parlamento Europeo una resolución sobre la necesidad de oponerse a la actividad de los medios rusos, en la que indicó como las principales amenazas a Sputnik y RT.
¿Por qué este interés político en que los ciudadanos no accedan a la versión rusa de lo que sucede en el mundo? ¿Qué medios dicen los gobiernos que debemos leer?