Valentino Arteaga
Digital Sevilla, 05/07/2019
[Otra denuncia en falso impulsada por el feminismo pijo e inquisitorial del #metoo que se cae en pedazos...]
El joven que había denunciado en 2016 al famoso actor Kevin Spacey, propiciando el fin de su carrera tras protagonizar importantes películas y series, ha retirado de manera definitiva los cargos, según informan medios locales.
El abogado que representa al actor afirmó que el caso se abandonó "de forma voluntaria", según detalla The Boston Herald.
El denunciante, hijo de un conocido periodista de una cadena de televisión local, denunció que en julio de 2016 el actor, galardonado con dos premios Oscar, le metió la mano en sus pantalones dentro de un bar en Nantucket.
El joven afirmó que gravó el momento pero más tarde, cuando se requirió que presentase las pruebas aseguró que perdió el teléfono móvil en el que guardaba las imágenes.
Por este motivo, el padre del acusador deberá comparecer ante el tribunal para explicar su desaparición, ya que los abogados de Spacey sostienen que el teléfono contenía pruebas exculpatorias.
Además, la defensa de Spacey cargó contra la fiscalía, a la que acusó de haber presentado cargos contra el actor de forma prematura.
Según la denuncia del joven, él empezó a hablar de manera amistosa con Spacey en el bar en el que trabajaba, y mintió sobre su edad al asegurar que tenía 23 años en lugar de 18.
Spacey afronta una pena de hasta dos años de prisión si es declarado culpable, ya que todavía la fiscalía mantiene su acusación, pese a que la supuesta victima la ha retirado.