El pasado jueves día 20 la TV daba la noticia de la captura de Gadafi y, al poco tiempo, la de su muerte. En los sitios de internet críticos con las versiones oficiales esta información se acogió con escepticismo: ya nos habían mentido más veces, como cuando se anunció la toma de una Plaza Verde de cartón piedra que no estaba en Trípoli sino en Doha (Qatar) o cuando se anunció varias veces la captura de varios hijos de Gadafi o incluso la muerte de éste, con trucaje fotográfico incluido. Pero los días han pasado y la noticia parece confirmarse: Gadafi ha sido asesinado [1]. Esos esbirros de la OTAN que nuestros medios llaman "rebeldes libios" le dispararon a quemaropa un tiro en la cabeza tras capturarlo con vida. Había estado en Sirte dirigiendo la resistencia frente a los ataques de la OTAN y no se había escapado a Argelia o al África subsahariana como habían difundido nuestros periodistas. Murió al pie del cañón como él ya había anunciado.
Si la actitud de los líderes de los países atacantes (esos que crean tribunales penales internacionales para juzgar las tropelías de los demás) celebrando la ejecución sin juicio previo de Gadafi fue absolutamente indecente no lo fue menos la actitud de los medios. En TVE canal 24 horas la periodista que daba la noticia conectó en directo con el escenario del crimen en las afueras de Sirte, donde esos salvajes contracabezas amigos de occidente gastaban munición disparando al aire y gritaban "Alah Akbar"; y entonces se nos anunció que íbamos a oír la opinión de un "ciudadano libio" (sic) sobre lo que estaba aconteciendo. Uno podría pensar que el "ciudadano libio" era un señor que pasaba por allí en ese momento, pero nada más lejos de la realidad: era ni más ni menos que un jefecillo de los facciosos al servicio de la OTAN, que además de alegrase de la ejecución extrajudicial de Gadafi aprovechó a pedir a occidente "mucha, mucha ayuda" o sea mucho, mucho dinero para la reconstrucción de lo que ellos con sus flamantes lanzagranadas y sus socios de la OTAN con sus bombas de racimo (contra las cuales, por cierto, España firmó un tratado) habían destrozado. ¡Cómo se puede tomar el pelo al telespectador y de manera tan cínica! Y además se manipula a cargo del erario público porque estamos hablando de una cadena estatal. Por su parte, en la Sexta (Mediapro), cadena privada que se las da de ser "de izquierda", el plumífero de turno también se congratulaba de la muerte del "sátrapa" al tiempo que repetía hasta la saciedad que la guerra de Libia no es la guerra de Irak... Por supuesto: para Mediapro (grupo mediático al que pertenece la Sexta y el diario Público) Irak no es Libia, porque en el caso de Libia prevalecen sobre su habitual "izquierdismo de salón" los negocios de esta empresa mediática con la monarquía feudal qatarí (a la que nunca calificarán de satrapía los chicos de Jaume Roures) y su cadena Al Qaeda... Perdón, quería decir Al Jazeera. ¿Para cuándo un Tribunal Penal Internacional para periodistas que fomentan masacres como la ocurrida en Libia? ¿Acaso han olvidado nuestros periodistas que el artículo 20 de la Constitución Española establece el derecho de los ciudadanos a "recibir información veraz por cualquier medio de difusión"? Parece ser que sí (Sobre este tema léase la entrevista que publicó El País del 07/10/2011 al Ministro de Exteriores de Ecuador. La entrevista no pretendía informar al lector sino hacer quedar en mal lugar al político ecuatoriano, por la sencilla razón de que éste se había atrevido a hablar de la responsabilidad penal de los peridiódicos ecuatorianos que manipularon la información para hacer triunfar el intento de golpe contra el presidente Correa. El País sabrá por qué tiene tanto interés en aliarse con los sectores golpistas de Ecuador, igual que hizo cuando intoxicó con falsedades para justificar el golpe fallido en Venezuela en abril de 2002).
Rafael Correa, Presidente de Ecuador:
"La ejecución de Gadafi es un crimen".
"La ejecución de Gadafi es un crimen".
En cuanto a lo que pasará a partir de ahora en Libia, el tiempo lo dirá. No parece que la resistencia numantina de los partidarios del asesinado Gadafi vaya a desaperecer de la noche a la mañana; hay que tener en cuenta que estamos hablando de un país con una fuerte tradición de lucha anticolonial. Pero lo que es seguro es que la OTAN intentará fomentar el mismo caos que ha fomentado en Irak (y que salpica a todo Oriente Medio) y en Kosovo (esta misma semana ha habido choques entre los pocos serbios que han sido "limpiados étnicamente" en Kosovo y las fuerzas de ocupación de la OTAN). De esta manera EE.UU., apoyándose en la codicia neocolonial de sus socios occidentales, intentará bloquear cualquier tentativa de crear un estado mínimamente viable en zonas ricas en recursos energéticos. Ya tiene suficiente compatencia con el imparable ascenso de los dos grandes colosos asiáticos China e India.
Nota:
[1] A pesar de todo hay sitios en los que a día de hoy se afirma que el hombre asesinado no es Gadafi sino un ciudadano libio de nombre Ahmid (¿Propaganda gadafista?). Véase aquí:
http://libyanfreepress.wordpress.com/2011/10/23/non-e-gheddafi-luomo-ucciso-a-sirte-si-chiamava-ahmid/