1.- El feminismo, con su idea de que la naturaleza masculina es la causa principal de todos los males que sufren las personas del sexo femenino, es ideal para dividir y enfrentar a los explotados de ambos sexos.
2.- Esta división y enfrentamiento permite al Estado ganarse la simpatía de una parte de los explotados para su reclutamiento en una especie de cruzada antimasculina, ideal para justificar el fortalecimiento del aparato estatal.
3.- Este fortalecimiento del Estado facilita a la clase dominante seguir en poder de los medios necesarios para explotar el lado más vil y miserable de la naturaleza humana (especialmente la competitividad entre oprimidos y su sumisión a los opresores) con el fin de aumentar sus intereses económicos.
4.- Esta explotación del lado más vil y miserable de la naturaleza humana conduce inevitablemente, no sólo a perpetuar la opresión de la mayoría de los individuos, sino a que la que sufren las mujeres continúe siendo mayor.