domingo, 13 de agosto de 2023

JOHN CLAUSER HABLÓ EN ‘QUANTUM KOREA 2023'

Por The Naked Emperor

extramurosrevista.com, 09/07/2023

John Clauser, físico teórico y experimental estadounidense con una larga y exitosa carrera, está especializado en el ámbito intelectualmente exigente y académicamente sofisticado de la mecánica cuántica. Su trabajo en este campo le ha llevado a contribuir a investigaciones pioneras y reflexiones que han desafiado nuestra comprensión del mundo físico.

Como prueba de la profundidad y repercusión de su contribución científica, el año pasado recibió el Premio Nobel de Física. El premio se le concedió “por experimentos con fotones entrelazados, establecer la violación de las desigualdades de Bell y ser pionero en la ciencia de la información cuántica”. Este logro, considerado por muchos la cumbre de la carrera de un científico, cimentó aún más su reputación de visionario dentro de la comunidad física.

Clauser ha participado recientemente en la prestigiosa conferencia “Quantum Korea 2023”. Este evento de alto nivel tuvo lugar el 26 de junio y se celebró bajo el patrocinio del Ministerio de Ciencia y TIC en el emblemático Dongdaemun Design Plaza (DDP) de Seúl, la capital surcoreana. Fue una oportunidad para que Clauser compartiera sus pensamientos, su sabiduría y sus reflexiones sobre el estado actual del consumo de información en el mundo.

En su discurso de apertura, Clauser ofreció un mensaje contundente y resonante: “El mundo en que vivimos ahora está lleno de desinformación. Hay que desempeñar el papel de un juez que distingue entre la verdad y la mentira basándose en observaciones precisas de los fenómenos”. Examinó críticamente la difusión de la información, lamentando que “la información errónea sea difundida por quienes tienen fines políticos y oportunistas”. Incluso dirigió una mirada crítica hacia la tecnología, señalando cómo “incluso los ChatGPT pueden decir mentiras mejor que los humanos… es difícil que los humanos o los ordenadores digan la verdad”.

Aprovechó su discurso para dirigirse directamente a una joven y prometedora generación de científicos y estudiantes de ingeniería coreanos. En su mensaje, Clauser insistió en la necesidad de verificar los hechos y en la importancia de ser un informador preciso para el público, a fin de cumplir su crucial función social. La urgencia de este deber, argumentó, es cada vez mayor en esta época en la que los sistemas de inteligencia artificial (IA) proporcionan a los usuarios una avalancha de información, no toda ella verificada o exacta.

Basándose en su propio campo de especialización, la mecánica cuántica, y reflexionando sobre su ilustre carrera, Clauser insistió en que “la verdadera verdad puede encontrarse observando los fenómenos naturales”. Cree firmemente que la observación del mundo natural, en toda su complejidad y matices, es el camino hacia la verdad y la comprensión.

Dirigiendo sus críticas a la comunidad científica internacional, Clauser expresó su preocupación por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), al que acusó de difundir información errónea sobre el estado del clima del planeta. Dijo: “No creo que haya una crisis climática… Creo que los procesos clave se exageran y malinterpretan por un factor de alrededor de 200”.

En mayo, Clauser se incorporó al Consejo de Administración de la Coalición CO2. Esta organización sin ánimo de lucro está formada principalmente por científicos que cuestionan la narrativa dominante en torno al cambio climático y el calentamiento global. Al ser elegido miembro de la junta, Clauser expresó su convicción de que la narrativa predominante en torno al cambio climático representa una corrupción de la ciencia.

En mi opinión, no existe una crisis climática real. Sin embargo, hay un problema muy real en proporcionar un nivel de vida decente a la gran población mundial, y una crisis energética asociada. Esta última se está presentando innecesariamente como más grave, por lo que, en mi opinión, se trata de una ciencia climática incorrecta.

¿Cómo se le permitió ganar un Premio Nobel con semejante blasfemia?