[Al final, tenía que pasar. Han pillado a la AEMET falseando datos para amoldar la realidad a la falsa teoría del calentamiento global antropogénico.]
Unai Cano
La Gaceta, 22/06/2024
En un análisis comparativo entre dos informes de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), correspondientes a las primaveras de 2016 y 2024, se revela una discrepancia notable en la manera en que se han presentado los datos climáticos —en concreto, la temperatura media—, lo que genera preocupaciones sobre la transparencia y la objetividad en la divulgación de información por parte de un organismo del Estado.
En la primavera de 2016, según el informe de la AEMET, la temperatura media fue de 13,1 ºC, situándose 0,5 ºC por debajo de la media estacional. Este periodo se catalogó como frío, siendo la vigésimo tercera primavera más fría desde 1965 y una de las más frescas del siglo XXI. Las precipitaciones fueron significativamente elevadas, alcanzando un 34% por encima de la media trimestral, lo que indicaba un periodo húmedo y frío.
En contraste, la primavera de 2024 fue descrita como cálida en el conjunto del país, con una temperatura media similar a la de 2016. Este periodo se posicionó como el octavo más cálido del siglo XXI y décimo desde 1961. Sin embargo, se podría haber utilizado el mismo enfoque que en 2016 para destacar que entraba en el top 15 de primaveras más frescas de los últimos 60 años. Aunque las precipitaciones se mantuvieron en valores normales, se mencionaron desigualdades geográficas durante la estación.
El contraste entre ambos informes plantea interrogantes sobre la consistencia en la presentación de los datos climáticos por parte de la AEMET y, por extensión, del Gobierno español. La aparente manipulación de la información climática podría estar destinada a crear percepciones sesgadas y a generar temor innecesario entre la población respecto a los cambios climáticos y sus posibles consecuencias. Prueba de ello son las constantes llamadas a la sostenibilidad que se hacen desde la izquierda pese a que ni existen pruebas definitivas de que la implicación de un país como España perjudique a la capa de ozono ni se están viviendo temperaturas diferentes a las de los últimos años.
«Cambiar la narrativa climática según convenga políticamente es un desafortunado ejemplo de cómo se maneja la información pública», critica un analista ambiental independiente. «Presentar una primavera con temperaturas similares como fría en un año y cálida en otro puede confundir a la ciudadanía y minar la confianza en las instituciones».
La falta de transparencia en la comunicación de los datos climáticos también sugiere una posible agenda política (Agenda 2030) detrás de los informes, lo cual es preocupante en un contexto global donde la gestión adecuada de los fenómenos climáticos es crucial para la planificación y la seguridad pública.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha reaccionado a la noticia de LA GACETA que revelaba la doble vara de medir de la institución ante temperaturas similares hace algunos años y ahora. En concreto, comparábamos los titulares publicados en 2016 y en 2024 ante dos primaveras con la misma temperatura media: 13,1°C. Hace casi una década, se consideraba «fría y muy húmeda», mientras ahora se ha calificado como «más cálida de lo normal».
Según confirman, en el año 2020 realizaron un cambio de método de análisis climático para hacer el calculo «más preciso»: «El método anterior no era malo. En climatología se trata de elegir un modelo y trabajar con él de la misma manera y los resultados obtenidos serán homogéneos, pero el actual es más robusto y realista».
«Históricamente, la temperatura media en España se venía calculando con una serie de estaciones seleccionadas. En concreto eran 39 para la Península y tres para Baleares. Para hacer el cálculo de los valores medios mensuales y anuales de temperatura se aplicaba una media ponderada. El valor absoluto no era realista, ya que estábamos calculando medias con datos de una altitud media de 385 cuando en realidad la altitud media del territorio es 300 metros superior, por lo que hay que esperar que con el método antiguo las temperaturas fuesen más altas«, explicaron en otro hilo de hace escasos días.
«El método empleado desde 2020 es más robusto y realista mediante el cual se aplican técnicas SIG geoestadísticas en las que no solo se tiene en cuenta la temperatura, sino que también se hacen ajustes con variables tales como la altitud, la latitud y la distancia al mar«, confirman añadiendo que ven lógico que el tema genere dudas y están dispuestos a responderlas.
Además, comparten una imagen con la que señalan que en España se están viviendo temperaturas diferentes a las de los últimos años: «La temperatura media anual en España ha experimentado un incremento estadísticamente significativo de 1,57 ºC«.
También revelan que los récords de carácter cálidos han sido veintiocho veces superiores a los récords de carácter frío en España, insistiendo en que las actividades humanas han provocado el cambio climático antropogénico de forma inequívoca.
Por último, se desvinculan de la Agenda 2030 y el alarmismo climático, destacando que son un organismo técnico, y que su tarea se basa en el análisis científico de los datos y en cumplimiento de sus deberes como trabajadores públicos.
El portal RTVE 2030 —destinado a cubrir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030— ha celebrado su primer aniversario con una imagen renovada y nuevos contenidos. Desde que la Corporación lanzó la aplicación web en junio de 2023, se han analizado más de 18.000 horas de programas de televisión para determinar su contribución a esta agenda que nadie ha votado.
La herramienta utiliza Inteligencia Artificial para saber cuánto tiempo dedican los informativos, programas y documentales de TVE a temas de interés social y medioambiental como la pobreza, la salud o la movilidad sostenible.
52%) a temáticas relacionadas con los objetivos de la Agenda 2030, y que los que más cobertura reciben son los relacionados con instituciones sólidas, paz y justicia (ODS 16; 3.061 horas), educación y cultura (ODS 4; 1.954 horas) y salud (ODS 3; 1.251 horas). Les siguen los referidos a ciudades y comunidades sostenibles (ODS 11; 1.186 horas), ecosistemas y biodiversidad (ODS 15; 1.147 horas) e igualdad de género (ODS 5; 958 horas).
Desde su lanzamiento hace un año, el proyecto desarrollado por RTVE y Political Watch ha ido dando cada vez más espacio a estos valores: se han triplicado el número de programas incluidos e incrementado el periodo de análisis, de 2015, año en que la ONU aprobó la Agenda 2030, hasta la actualidad. A día de hoy cuenta con un total de 70 programas, lo que supone más de 24.500 episodios. Se incluyen todas las ediciones del Telediario nacional y autonómico —en castellano—, magazines como Mañaneros y Aquí la Tierra y decenas de programas divulgativos y documentales.
En su última actualización la web ha incorporado una nueva visualización: nubes de palabras para mostrar las temáticas con más apariciones en pantalla en relación a cada ODS. Así, revela que al hablar de desigualdades (ODS 10), los temas más mencionados son los vinculados a personas con discapacidad —con una importante representación del programa De seda y hierro— e inmigración y xenofobia, mientras que el ODS 11 suele asociarse con el acceso a la vivienda y el patrimonio cultural en los barrios y los pueblos.
¿Qué es la Agenda 2030?
La Agenda 2030 se aprobó en la Asamblea General de la ONU en septiembre de 2015, con el visto bueno de 193 Estados miembro. La página web del organismo internacional promovió entonces esta agenda política «a favor de las personas, el planeta y la prosperidad, que también tiene la intención de fortalecer la paz universal y el acceso a la justicia». En forma de plan a quince años vista, los Estados miembro de la ONU se comprometieron entonces a beneficiar a «los más pobres y vulnerables«. Claro que la imperante democratización los ha llevado a hacernos a todos más pobres y vulnerables.
Esta agenda se concretó a través de 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, a su vez diseminados en 169 metas «de carácter integrado e indivisible que abarcan las esferas económica, social y ambiental».