Jesús Sanz Morales
Plásticos y decibelios, 10/11/2023
Roger Waters ha dicho que se pregunta si los ataques perpetrados supuestamente por Hamás el 7 de octubre podrían haber sido una “operación de bandera falsa”.
El cofundador de Pink Floyd se ha enfrentado una vez más a acusaciones de antisemitismo por afirmar que la masacre, que mató a 1.400 israelíes el mes pasado, fue “desproporcionada” y el controvertido músico cuestionó los orígenes del ataque.
En una entrevista con el periodista Glenn Greenwald, Waters expresó sus dudas sobre el número de muertos y el papel de Hamás en el ataque. Cuando se le preguntó si el ataque podía “justificarse”, dijo: “No sabemos qué hicieron [Hamas]” durante la invasión.
“¿Está justificado que resistieran la ocupación? Sí. Pero repito, es lo que usted dijo, son los Convenios de Ginebra. Están absoluta, legal y moralmente obligados a resistir la ocupación desde 1967. Es una obligación”.
Añadió que si bien condenaría los crímenes de guerra “si se cometieran”, creía que la masacre ha sido “desproporcionada porque los israelíes se inventaron historias sobre decapitaciones de bebés”. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, había compartido fotografías gráficas de bebés “asesinados y quemados” tras el ataque.
“Lo que sí sabemos es si fue una operación de bandera falsa o no, o lo que sea, o lo que pasó, y cualquier historia a la que lleguemos… y no sabemos si alguna vez vamos a obtener mucho de la historia real. Siempre es muy difícil saber qué pasó realmente”.
Después de que se le pidiera repetidamente que condenara el ataque, Waters dijo que “puede haber habido casos individuales” de civiles asesinados. Continuó citando un artículo de The Grayzone –que ha sido acusado de difundir información errónea– que afirmaba que “probablemente los primeros 400 muertos eran militares israelíes”, lo que “no es un crimen de guerra”.
Waters fue recientemente objeto del documental “The Dark Side Of Roger Waters”, que fue producido por la Campaña Contra el Antisemitismo y recopila varios incidentes de presunto antisemitismo perpetrados por el músico.
Rogers se pronunció anteriormente en contra del documental con una publicación en su sitio web oficial, descartando el proyecto como “una pieza de propaganda endeble y sin complejos”. También afirmó que “mezcla indiscriminadamente cosas que supuestamente dije o hice en diferentes momentos y en diferentes contextos, en un esfuerzo por presentarme como un antisemita, sin ningún fundamento real”.
Destaca un controvertido concierto en Alemania en mayo, que fue criticado por el Departamento de Estado de Estados Unidos, que lo describió como “profundamente ofensivo para el pueblo judío”.
Los comentarios se produjeron después de que el músico apareciera en el escenario de su espectáculo vistiendo una gabardina negra con un emblema parecido a una esvástica. En ese momento, el músico defendió la elección, afirmando que el segmento era una declaración contra el fascismo, la injusticia y la intolerancia y calificó las críticas al mismo como “falsas y políticamente motivadas”.
Según un informe de AP News, el número de muertos ha superado ya las 10.000 personas en Palestina y las 1.400 en Israel.